Es de humanos equivocarse, errar, pero lo que no es de humanos es saber reconocer nuestros errores, es decir en aquello que estamos fallando, o aquello que nos está faltado poner al servicio de los demás. Muchas veces en la vida podemos ver en nosotros las cualidades, pues casi siempre vemos nuestros defectos y ese lado negativo que no nos gusta.
Hoy quiero compartir con todos ustedes un fin de semana vivido en Teocelo, Ver. Para empezar un clima riquísimo, las bajas temperaturas es lo más delicioso de esos días, sobre todo cuando estás en contacto con la naturaleza. El ambiente material fue muy cómodo, ya que la casa donde estuvimos es un lugar lleno de áreas verdes y alejada del ruido de la ciudad. El fin cada uno de los que asistíamos al "taluc" (Taller de Líderes Universitarios Calasanzcios) era convivir y conocer nuevas personas, y creo que se logró.
Independientemente de la convivencia fue un fin de semana de formación humana, donde entré a mi interior y me fijé qué cosas estoy haciendo para el bienestar del mundo donde estamos inmersos; fue un tiempo de crisis existencial, y no solo para mi sino también para muchos compañeros, ya que el estar lejos de la ciudad, donde la vida es más rápida y no hay suficiente tiempo de reflexionar, ayudó a hecharnos un clavado en nuestro interior y reflexionar qué es lo que queremos hacer en la vida.
El ser líder no es fácil amigos, ya que esto implica guiar, conducir, llevar, caminar, etc... junto con un grupo de seres humanos iguales a ti, con las mismas virtudes y defectos, es tener la capacidad de escuchar las opiniones de los demás y no ser un capataz, donde se tiene que hacer lo que el líder diga. Sin embargo, el que se decide serlo es porque sabe que tiene la capacidad y las cualidades necesarias.
No hay que tener miedo en la vida a hacer las cosas, hay que entrarle al cuerno por los toros como decimos en el lenguaje cotidiano. La vida no es fácil pero no es imposible de vivir. Este fin de semana deja un buen sabor de boca y muchos recuerdos en mi mente, pues el conocer nuevas personas y ver en ellos las cualidades, y poner a su servicio tus cualidades hace que la vida sea más feliz y compartida; es decir olvidarnos de ese egoísmo de creer que todo lo podemos hacer sin los demás, sino sabernos valer de las cualidades de todos y en equipo hacer un buen trabajo.
Hay que celebrar la vida y
entender que no es imposible la vida, pues si así lo fuera no estaríamos ocupando un tiempo y un espacio en el mundo. Muchas veces parece que estamos solos y caminamos como ciegos en la vida, sin camino ni rumbo fijo, sin embargo no saben que siempre hay alguien que te va guiando y te va ayudando a encontrar tu camino y la felicidad, y lo mejor es que en ocasiones los que te ayudan son las personas que menos crees que te puedan ayudar, que tengan la capacidad de hacerlo. Por eso hay que juntar las cualidades de todos y hacer un gran equipo para salir adelante. Hay que descubrir siempre los momentos alegres y sacar el artista que llevamos dentro, para poder alegrar a los demás y hacerlos pasar un rato feliz.
Ánimo, nos vemos en la próxima fuga de letras...
